Por ahí del año 2016 ya llevaba yo trabajando como programador web freelancer un par de años, siempre me ha gustado administrar mi tiempo, decidir las tecnologías que uso y no tener juntas obligatorias, pero como freelancer el dinero nunca era constante y en ese entonces me estresaba mucho no lograr llegar a fin de mes.
También rondaba por mi mente el querer salir de México por primera vez y conocer el mundo, sobre todo porque mi novia quería ir a París y yo tenía el plan de llevarla y proponerme de la forma más cliché y darle el anillo de compromiso en la ciudad del amor, al pie de la torre Eiffel.
Pero no tenía ahorros y tampoco la seguridad de conseguirlos pronto.
Así que tenía que conseguir un empleo bien pagado para poner en marcha mi romántico plan en solo un año, (spoiler alert) sí logré conocer París un año después, una vez que puse en orden estas tres cosas y conseguir un empleo que me pago $3,300USD mensuales. En ese momento de mi carrera eso era más que suficiente para permitirme ahorrar.
Primera cosa: Prepararme para entrevistas difíciles.
Un error que cometí algunas veces fue llegar a las entrevistas técnicas sin prepararme.
Obviamente, salían mal, no terminaba los ejercicios o no obtenía el resultado correcto, a veces no dominaba los conceptos o los términos con el nombre técnico y terminaba describiendo las cosas con palabras incorrectas, lo que le comunicaba a mi entrevistador que yo no dominaba las herramientas que argumentaba conocer.
Así que decidí dominar la jerga de mi profesión y sobre todo del lenguaje de programación y herramientas.
Segunda cosa: Practicar mi inglés para los dailies.
Yo buscaba un salario superior a los $2000USD.
Las opciones entonces eran empleos donde hablaría un poco de inglés. Mi inglés, al no ocuparlo anteriormente mas que para ver algunas series de TV, era pésimo, mi pronunciación; malísima, pero me puse a practicar. Practicaba solo lo básico; cómo presentarme, cómo describir mi día en un "daily standup" de scrum, cómo hacer preguntas y hacer clarificaciones. Aquí me ayudó mucho ver algunos tutoriales en inglés de la herramienta con la que trabajaría y hacer notas sobre cómo se describe y pronuncia.
Practiqué mucho, obligué a mi novia y a algunos amigos a entrevistarme en inglés. Esto en verdad me ayudó mucho.
Tercera cosa: Pimpear mi portafolio (no tenía nada entonces).
La última cosa que en verdad cambió el juego, fue mi portafolio.
Me tomé el tiempo de crear una pequeña página que reflejara mi personalidad (al final soy desarrollador web, debía tener mi propia página). En ella coloqué algunas imágenes y links a las aplicaciones reales de mis clientes, también describí algunos proyectos que realice cuando estudiaba programación por mi cuenta con los enlaces a Github, incluso escribí algunas entradas de blog y tutoriales relacionados con las herramientas que dominaba y también los amontoné en la sección correspondiente.
Esto tuvo un gran impacto, pues cuando me preguntaban sobre mi experiencia, no solo hablaba de ella, también podía mostrarla y hasta presumir.
Teniendo todas estas cosas listas y después de hacer muchas entrevistas, por fin aterricé un buen empleo.
Me vendí correctamente, mi credibilidad creció gracias al dominio de los términos y la evidencia de mi portafolio, sin mencionar que haciendo entrevistas mejoré en ellas.
Y aunque necesite un par de años más tomando clases particulares de inglés para hablarlo con confianza, en ese primer empleo pude comunicarme por primera vez con desarrolladores de otras partes del mundo, todo ese primer año de trabajo nunca dejé de sudar y tartamudear al hablar inglés, pero no me detuve, creí en mí y trabajé duro.
Disfruté de muchas cosas en París, me comprometí y descubrí mi amor por el cruasán, todo gracias a que puse en orden estas 3 cosas.
Con esta estrategia conseguí mi primer empleo en dólares, y tú también puedes hacerlo.
Con el paso del tiempo y seguir practicando, aprendí nuevos trucos que me ayudaron a conseguir mejores salarios, pero esos ya te los platicaré en otro post.
Abrazo. Bliss.
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