Seis pasos que te permitirán construir tu emprendimiento para que abras las puertas de este nuevo mundo pleno de oportunidades para ti
A lo largo de nuestra formación siempre surge la inquietud en cuanto a qué voy a dedicarme cuando reciba el título profesional… ¿Será que trabajaré en una multinacional?, ¿En una mediana empresa? O más bien ¿Crearé mi propio negocio?
La única persona que puede tomar esa decisión eres tú. Por ello, siguen seis pasos que te permitirán construir tu emprendimiento para que abras las puertas de este nuevo mundo pleno de oportunidades para ti.
Esta guía te muestra el camino para alcanzar el éxito, pero indudablemente lograrlo dependerá de tu capacidad de liderazgo y tu creatividad para innovar. Y si después de leer este artículo quieres saber más, recuerda que Sergio i+E recibe propuestas desde el 26 de enero hasta el 15 de febrero para el programa "Transforma sueños en empresa", la mejor opción para crear un plan de negocio y cumplir, además, con el requisito de grado.
Identifica una necesidad. Aunque suene obvio, es necesario hacerlo. Debes buscar aquello que falta o ese "algo" que puede mejorar un servicio y que un grupo de personas no ha podido satisfacer. Así, aseguras la fidelidad de tus clientes y ellos no te reemplazarán tan fácilmente.
La idea. Este paso puede parecerte el más difícil pero, sin duda, es el que dará las bases de tu emprendimiento. Por eso es aconsejable hacer una lluvia de ideas y consultarla con varias personas para que evalúes su opinión y así te ayuden a tomar una decisión.
Concepto del negocio. Este punto te marca el momento de procesar toda la información que ya posees; investiga y busca la manera ideal que te permitirá responder a esa necesidad insatisfecha que identificaste al inicio. Cuando ya la tengas dale un nombre al producto o servicio que vas a ofrecer.
Investigación de mercado. A esta altura del proceso de emprender ya puedes realizar un recorrido por el entorno para identificar el comportamiento interno y externo del mercado, es decir, los clientes, los productos y servicios sustitutos, así como los puntos de venta y la competencia. Es importante que en este paso seas lo más minucioso posible, pues de ello depende en gran medida la viabilidad del negocio.
Modelo de negocio. Es hora de planificar, organizar y crear un programa que, a futuro, puedas utilizar. La recomendación aquí es que crees tu propio plan de negocio, pues con este podrás apreciar el panorama completo de tu proyecto; es, además, la mejor estrategia para presentarle al inversionista tu modelo de negocio y conseguir el capital semilla para ponerlo en marcha.
Puesta en marcha. Este sexto punto es al que todo emprendedor aspira llegar, pues es aquí donde se desarrolla el negocio. Para ello, debes crear estrategias, tácticas y acciones que respondan a esa necesidad insatisfecha que has identificado inicialmente.
Si alcanzaste esta meta, ¡Felicitaciones! Ya diste un primer gran paso para que tu idea de negocio se mantenga y, mejor aún, empiece a reportar buenos resultados.
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